La revolución de la nube musical

Hoy vamos a hablaros de la lucha de modelos de negocio, en el mercado musical. Como todos sabéis, aunque las majors se resistan a ver, la industria musical se ha mudado a la red.  La distribución de música a través de Internet y los móviles representan unas tasas de crecimiento anuales de dos dígitos, así como la publicidad o las redes sociales, que se posicionan como la base para el desarrollo de los nuevos modelos de negocio.

Como en el resto de sectores tecnológicos, tenemos a los grandes púgiles peleandose por la victoria. En una esquina tenemos a la inconfundible Apple, propietaria de iTunes y principal dominadora del mercado con la mayor tienda musical del mundo. En otra esquina tenemos a la gigante e indiscutible Google que está en casi todos los negocios online que te puedas imaginar y en nuestro caso con Music Beta. En la tercera esquina tenemos a la historica Amazon que ofrece una gran gama de archivos mp3 a través de Cloud Drive. Y en la cuarta y última esquina tenemos a un púgil benjamín que está dando que hablar y mucho en la industria musical. Hablamos del conocido Spotify, referente actual en la escucha vía streaming.

 Todos los púgiles están dando el paso hacia la música en la “nube” que no es otra cosa que la oportunidad de escuchar cualquier tipo de música a través de la instalación de una aplicación en nuestros dispositivos y la conexión a Internet. Ya no es necesario descargar o almacenar música, puesto que la tenemos directamente en la web a golpe de clic. Amazon lanzó no hace mucho Cloud Drive, un servicio en el que se almacenan en la nube la música, en formato mp3, que compremos a través de Amazon. Luego llego Music Beta de Google que permite reproducir desde cualquier dispositivo Android aunque no tenga conexión a Internet y sin necesidad de sincronizarlo. Otro caso es el iCloud de Apple, donde la música que compras en iTunes aparece automáticamente en todos tus dispositivos, donde quieras y cuando quieras. Y por último, tenemos el streaming de Spotify, donde no se compra, ni se descarga, sino que las reproducimos en nuestros ordenadores o dispositivos móviles de manera instantánea directamente desde Internet. Aunque Spotify no fue el primero (Deezer, Lastfm o Grooveshark llegarón antes) si es el que más repercusión está teniendo y más ahora con su entrada en EEUU y sus acuerdos con Facebook. Spotify ya permite a sus usuarios compartir información sobre la canciones que escuchan en Facebook. Pero la cosa no se queda ahí, según Facebook creará una nueva etiqueta “music” y un boton Play/Pause para controlar la música de forma rápida.

Y para no cansarnos de escuchar música, Spotify acaba de larzar una nueva plataforma que integra múltiples aplicaciones, entre ellas una de la revista Rolling Stone, que permite leer críticas de canciones, o una de Last.fm con la que se puede compartir lo que escuchas. También la aplicación de SongKick permite leer las letras de las canciones que se están escuchando y las de TuneWiki que informa al usuario de dónde ofrecerán conciertos próximamente los grupos a los que están escuchando, al tiempo que les permiten comprar entradas para ellos.

Esto es solo el comienzo, y la verdad es que está poniéndose muy interesante el sector de la música. A ver quién es capaz de derrocar el imperio de iTunes.